La Pasta Italiana
La pasta puede ser el
plato principal, pero también la guarnición de carnes, pescados, ensaladas y
sopas.
Cocción y usos de
la pasta Italiana.
Las pastas italianas
son unas preparaciones hechas a base de harina, procedentes de trigo duro y
sal.
Es un alimento muy rico en carbohidratos y de sabor neutro, lo que quiere
decir que es compatible con todo tipo de alimentos. Así, brinda la posibilidad
de realizar todo tipo de combinaciones gastronómicas.
Cocinar la pasta al
dente
Para cocer la pasta
italiana, se pone a hervir agua en una cazuela con un chorro de aceite.
La
proporción será de 10 litros de agua por kilo de pasta, sea del tipo que sea.
Cuando hierva el agua, se añade un puñado de sal y posteriormente la pasta (de una
textura dura y sin sabor a harina) y se irá removiendo con una espátula de
madera o tridente para que no se apelmace y quede bien suelta.
Cuando la pasta
esté al dente, se retira la cazuela del fuego y se escurre para poder condimentarla
y añadirle los ingredientes necesarios.
En este momento, si se desea preparar
un plato frío, se refrescará la pasta con agua fría.
Para detectar que la
pasta está al dente es necesario sacar de la cazuela una unidad y comprobar si
en el interior queda un pequeño hilo de pasta cruda (de color diferente). Se ve
de forma muy clara en el caso de los macarrones cuando se parten por la mitad.
Este truco también sirve para los espaguetis, aunque también para ellos existe
un curioso truco: si se lanza uno de ellos contra una pared de baldosas y éste
se queda pegado significa que la pasta está al dente.
Aplicaciones de la
pasta
La pasta italiana
tiene dos aplicaciones principales, como plato o como guarnición.
En el primer
caso, constituye generalmente primeros platos acompañados de salsa e
ingredientes extras variados.
Como guarnición, podrá ir acompañada de todo tipo
de carnes y pescados.
Incluso puede usarse en ensaladas y también como
acompañamiento en caldos y sopas.
En este caso, la pasta se cuece dentro de los
mismos.
Elaboraciones básicas
Pasta a la italiana.
Después de cocer la pasta, se procede a un salteado con mantequilla y un poco
de aceite de oliva.
También se añade queso rallado y especias como el orégano y
la albahaca.
Este plato se utiliza mucho como guarnición y como base para otras
elaboraciones.
Pasta a la napolitana.
Es
una pasta a la italiana a la que se añade tomate concassé o tomate frito.
Pasta a la boloñesa.
Es
como una pasta a la napolitana pero con guarnición de carne picada.
Pasta al gratén.
Es
una pasta a la italiana mezclada con una bechamel o derivada, a la que se
agrega queso rallado por encima. Por último, se gratina en el horno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario